En los últimos días, se ha observado un renovado optimismo en el equipo económico, después de del primer salto cambiario de principios de 2024. Ante las dudas iniciales sobre la posibilidad de controlar la brecha cambiaria, los dólares financieros lograron estabilizarse y retrocedieron parcialmente, luego de alcanzar los niveles de octubre pasado, en torno a los $1.200.

La aprobación por parte del FMI para reactivar el acuerdo, antes suspendido debido a incumplimientos en la gestión de Massa como ministro de Economía, generó cierto alivio en el equipo económico y en le mercado. Se espera un próximo desembolso de 4.700 millones de dólares, fortaleciendo reservas y permitiendo afrontar vencimientos con el propio organismo.

Sin embargo, el nuevo compromiso para el corto plazo revela que la acumulación de reservas netas será menor de lo proyectado por el promedio estimado por mercado. Aunque se había comprometido a alcanzar los 10.000 millones de dólares, parte de ese monto ya fue adquirido a fines del año pasado, dejando un déficit de aproximadamente 6.500 millones hasta finales de 2024.

Este combo de resultados impactaron en los bonos en dólares, que reaccionaron al alza, y el gobierno pagó intereses cercanos a los 1.500 millones de dólares, impulsando los títulos argentinos a casi 40 dólares.

De todos modos, el frente financiero sigue siendo frágil y el equipo económico sabe que navegará aguas turbulentas hasta alcanzar el objetivo de llegar al mes de abril cuando prevén el ingresos de divisas por la liquidación de las cerealeras. Pero, al mismo tiempo, Caputo sigue con la idea de reducir pesos en circulación con el objetivo de ir esmerilando potenciales turbulencias en los dólares financiero. De momento no tuvo otra que seguir imprimiendo para afrontar compromisos.

El Bopreal, bono destinado a cancelar deudas con importadores, sigue siendo clave para la estrategia que pretende el ministro de Economía. Después de los primeros fracasos, la última colocación por aproximadamente 1.100 millones de dólares, fortalece su rol para absorber pesos del mercado, al suscribirse al tipo de cambio oficial. El gobierno espera que las futuras emisiones de enero sean aún más significativas, ya que ofrecen un incentivo fiscal hasta fin de mes al eximir del impuesto PAIS a quienes lo adquieran.

La estrategia del gobierno, en paralelo, es implementar un canje de deuda en pesos, con la emisión de nuevos títulos ajustados por CER a corto y mediano plazo, y sigue en pie la intención de llevar a cabo un megacanje para aliviar vencimientos millonarios de este año.

El mantenimiento del dólar oficial con un ajuste mensual del 2%, considerado temporal, se vincula a la necesidad de que el ajuste fiscal gane credibilidad como ancla antiinflacionaria. La aprobación del paquete impositivo para el gobierno es fundamental para equilibrar las cuentas públicas.

Después del acuerdo con el FMI, las novedades internacionales para el gobierno podrían llegar esta semana desde Suiza: Javier Milei viajará este lunes al foro de Davos y, según trascendió, tendrá reuniones importantes en el marco World Economic Forum en lo que será su primer presentación internacional del presidente. En el frente interno continuarán las discusiones a la ley Ómnibus y posibles novedades en el frente judicial en torno a los planteos contra el DNU.