La editorial rosarina de libro ilustrado que protagonizan tres mujeres

Se trata de Listocalisto, una editorial independiente y con una cadena "cien por ciento rosarina". Ya lleva más de 13 libros publicados y busca innovar para poder competir con el libro digital

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Listocalisto es una joven editorial de libro ilustrado de la ciudad, gestionada por tres mujeres que, a su vez, son ilustradoras. Ya llevan trece libros publicados, además de una colección de fanzines. “Nació como un proyecto directamente vinculado con lo que teníamos ganas de hacer”, explicó Silvina Maroni, una de las fundadoras.

Son tres mujeres, y si bien esa no fue necesariamente una clave en sus coordenadas iniciales, confiesan que sus proyectos individuales también eran “proyectos de mujeres”. Coincidieron en un curso de "Libro álbum" durante la semana de la lectura: Silvina Maroni, Angie Strappa y Ligia Rossi. Las tres son ilustradoras, entre otras profesiones.   

 “Además de la literatura, me di cuenta que me interesaban los aspectos materiales de los libros”, explicó Maroni, refiriéndose a todo el trabajo que involucra llevar una obra a papel y que se convierta en un libro.

Su idea fue hacer una editorial de libro ilustrado, lo cual le da un “toque específico porque no es narrativa ni ensayo”.

La experiencia de Maroni en otros emprendimientos la llevó a entender de manera temprana la importancia de que sea sustentable económicamente en el tiempo para que no sea un proyecto “que se abandona en dos años”. Es así que la editorial se autofinancia y, si bien todavía no les alcanza como única fuente de ingresos, es algo que tienen como horizonte.  

La particularidad que tiene el negocio editorial -más para una editorial pequeña- es que se ve golpeado por varios frentes. Entre ellos, el libro digital como competencia y la situación económica del país, que ata el precio del papel al dólar. De todos modos, desde Listocalisto sostienen que el libro infantil como producto es algo que aún continúa creciendo.

Es que la editorial cuenta con una colección completa dirigida al público infantil que “alimenta mucho” al proyecto, aunque aclaran que no les gusta hacer recomendaciones de recortes etarios, sino abrir las posibilidades de lectura.

En el futuro, buscan armar un “catálogo más contundente” y están pensando en armar una colección vinculada a “pedagogía y crianzas”. También buscan el crecimiento actual de su colección “Enredados” de fotografía. Y como novedad quieren sumar una serie de objetos que “acompañen los libros”, como pueden ser muñecos de personajes para la colección de infancias “A contrapelo”.

“Hoy el libro digital compite mucho con el impreso y por eso la objetualidad del libro en papel requiere que se haga un trabajo de otra manera”, afirmó Maroni.

 “Sumar algo que prolongue la experiencia de lectura y que haga presentes las razones por las cuales el libro en papel tiene que continuar”, amplió. Como ejemplos mencionó texturas, juegos de cartas y hasta códigos QR: elementos que lleven la experiencia de lectura más allá.

Listocalisto pudo dar sus primeros pasos gracias a haber ganado una convocatoria que organizó la Municipalidad, donde consiguieron un financiamiento para poder comenzar con un título. En segunda instancia, lograron un mayor impulso con Espacio Santafesino que les permitió armar un “mini catálogo”. Ya entonces, sumando la colección de fanzines, pudieron empezar a moverse en ferias y librerías.

Los libros de la editorial se pueden encontrar en el Mercado de Frutos Culturales, en el stand de “Banquete editorial”, que comparte en asociación con otras editoriales. También se distribuyen en librerías como Mal de archivo, Paradoxa, Buchin, Oliva Libros y Homo Sapiens, entre otras, además de librerías online y distintas ferias.  

“En Rosario hay un público lector para este tipo de libros”.

Entre esos lectores se cuentan el público universitario, madres y padres jóvenes que buscan alternativas de literatura para sus hijos, y la movida gráfica que “siempre rastrea novedades”.

Cadena rosarina

Además, destaca el trabajo junto a la imprenta Sudamérica que también es rosarina, por lo cual se le agrega valor local a la cadena final. “Es totalmente rosarina, desde el inicio de la idea hasta la impresión”, sostuvo.  

“Hay muchas editoriales en Buenos Aires que imprimen, por ejemplo, en China y sin embargo el costo final no es menor al que nosotros podemos conseguir imprimiendo en la ciudad”, afirmó.

Modalidad stand compartido

“Las editoriales independientes nos estamos vinculando, generando una experiencia muy interesante para acceder a espacios en los que antes no teníamos posibilidad”, explicó Maroni y nombró como ejemplo al Mercado de Frutos, así como la Feria del Libro de Rosario. Es decir, principalmente en espacios de venta ya que señala que "uno de los costos más caros es el de distribución". Además, destacó que "resulta valioso compartir catálogos distintos en un mismo espacio".

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