La decisión del gobierno nacional de adelantar para las economías regionales el mínimo no imponible para el pago de contribuciones patronales, previsto en la reforma tributaria integral, "en Santa Fe beneficia a 11.500 trabajadores y empresas de los sectores de la producción de leche bovina, de fabricación de muebles y de elaboración de bebidas no alcohólicas", estimó Fernando Premoli, secretario de Empleo nacional al ser consultado por ECOS365 sobre el alcance de la medida en la provincia.

Con esta medida, a estos sectores le corresponde aplicar, a partir de marzo de 2019, un mínimo no imponible (MNI) de $17.500 en vez de $7.004 vigente para este año.

“Desde el Ministerio de Producción y Trabajo, tenemos el foco puesto en las pymes puedan generar empleo de calidad. A través de esta medida, las empresas pagan menos impuestos por sus empleados, lo que les permite ser más competitivas y crear nuevos puestos de trabajo”, señaló Premoli.

“En la provincia de Santa Fe, la medida tendrá impacto en empresas que emplean a 11.500 trabajadores, de sectores como el de la fabricación de muebles y el lechero, mejorando la competitividad de actividades clave para la economía santafesina”, aseguró el funcionario a ECOS365.

La nueva normativa tiene por objetivo bajar los costos no salariales del trabajo argentino y proteger e impulsar el empleo formal. A nivel país alcanza de forma directa a 250.000 trabajadores distribuidos en 24.000 empresas presentes en todas las provincias, con excepción de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

A nivel regional la medida alcanza a 9.100 empresas que emplean a más de 72.000 mil trabajadores, repartidos entre las provincias de Buenos Aires, Santa Fe, Entre Ríos y Córdoba.

Los principales sectores beneficiados son la fabricación de muebles y partes de muebles, principalmente de madera, la elaboración de pescado de mar, crustáceos y productos marinos, la producción de leche bovina, la elaboración de bebidas no alcohólicas, el cultivo de papa, batata y mandioca, el cultivo de frutas cítricas y la elaboración de jugos naturales y sus concentrados, de frutas, hortalizas y legumbres.

La medida genera incentivos para la formalización de aquellos trabajadores que se encuentran en la base de la escala salarial, segmento de asalariados que tienden a ser los más afectados por la informalidad laboral.

A través de la disminución del costo de contratación de trabajadores, se reduce el incentivo implícito de las cargas sociales a operar por fuera de la ley mediante el empleo no registrado. “Esta medida es una forma más de seguir trabajando en la mejorar de la competitividad, en hacer mucho más eficientes nuestras actividades productivas y continuar potenciando una mayor inserción internacional de nuestros productos y nuestras economías regionales”, sostuvo el ministro de Producción y Trabajo, Dante Sica, en la presentación de la medida.