Un local de zapatos de Rosario con diseño propio, Elda La Fratta, decidió apostar por una nueva estrategia y lanza su taller de diseño y confección de calzados.

Al ser fabricantes de calzado en la ciudad, buscan ofrecer una nueva modalidad de enseñanza en el rubro, dictando un taller de 6 clases donde el participante se llevará un zapato tipo prusiano o inglés, fabricado desde cero por sí mismo.

Elda La Fratta es un emprendimiento familiar iniciado por el padre de la familia, aunque recién cuando se sumaron sus hijas la producción fue masiva y se diversificó el negocio. Se dedican a la fabricación y comercialización de zapatos de cuero, carteras y accesorios.

Debido a la situación económica, se vieron obligados a abrir su propio local de venta al público en calle Rioja 1758 a principios de este año, para no perder posición en el mercado. “Cuantos más intermediarios pasen por un producto, más se encarece y menos consumo hay en época de crisis”, sostuvieron desde aquel momento.

Unos meses después, deciden volver a reinventarse y a readaptarse en una nueva visión de negocios. “Tenemos productos nacionales de buena calidad”, sostuvo Romina Bosio, Técnica Modelista en Calzado y Licenciada en Comercialización, una de las emprendedoras de la familia, que además será quien dicte el taller y quien está a cargo de todo el diseño de la marca.

En el curso se utilizarán componentes nacionales, se enseñarán todos los procesos y se repartirán los materiales necesarios, sin costo extra. Se dictarán los días sábados, a partir del 10 de agosto por la mañana, durante 4 horas. El costo es de $6500 en un pago en efectivo, con opciones para pagar en cuotas. La reserva de lugar se realiza el local mediante una seña y se los puede contactar presencialmente o a través de sus redes sociales. 

Un precio mínimo en el local de botas de cuero, forradas en cuero, ronda un rango de precios entre $3500 y $5000.

Entre otras de las ideas que surgieron de la situación difícil en ventas mayoristas, surgió una línea de delantales de cuero para oficio: cerveceros, soldadores, barberos, etc. “Seguimos apostando a trabajar con cuero, a pesar de todo”, sostuvo.

“Se trata de explotar los recursos propios para brindarle algo distinto a las clientas”, apuntó la emprendedora y agregó: “Que puedan diseñar lo que a cada uno le guste y aprender el oficio”.