La Cámara Argentina de supermercados (CAS) y la Federación Argentina de Supermercados y Autoservicios (FASA) emitieron un comunicado. Allí advierten que “el supermercadismo PyME y las Cadenas Regionales Argentinas están sufriendo un proceso de desabastecimiento, "gracias a las actitudes discriminatorias de sus proveedores”. De esta forma, solicitaron la urgente intervención de los organismos gubernamentales correspondientes.

"Hemos denunciado reiteradamente estas actitudes a las autoridades nacionales, porque además de no respetar lo establecido por la reglamentación vigente, en muchos casos son claramente discriminatorias hacia nuestros asociados de todo el país. Las condiciones de venta que se quiere imponer a los supermercados PyMEs no son las mismas que se aplican a las grandes cadenas extranjeras y/o nacionales", advierten en el comunicado.

Las entidades remarcaron que la situación es muy grave para los supermercados y autoservicios regionales, que tienen los precios de venta congelados a valores del pasado 6 de marzo de 2020. A su vez, los costos operativos se han disparado producto de diversos protocolos introducidos por la cuarentena del COVID 19, con horarios de atención reducidos, licenciamiento del personal con riesgos sanitarios, con petitorios de incrementos de haberes impagables del gremio mercantil.

"Solo se han traslado a precios los incrementos autorizados por la Disposición de la Secretaria de Comercio Interior Nº 13 / 2020, en diversas categorías de productos".

En cuanto a las medidas del Gobierno Nacional, los supermercadistas afirmaron que los súper argentinos vienen acompañando la gestión nacional: "hemos comunicado la decisión de no recibir mercadería que no cumpla con lo establecido por la Secretaria de Comercio Interior de la Nación, nuestros asociados informan periódicamente a la Secretaría sobre los casos que se registran, solicitando su intervención ante el proceso de desabastecimiento que se produce en ciertas categorías de productos esenciales como consecuencia de dicha decisión".

En este sentido, las entidades de supermercados y autoservicios indicaron que pretenden que se respeten los márgenes operativos anteriores a la cuarentena COVID 19, ya que, de no ser así, muchos negocios deberán bajar sus persianas. 

"Hacemos un llamado a la Secretaria de Comercio de la Nación, para que imponga su autoridad de regulación y disponga las actuaciones administrativas que correspondan, dando intervención a la Subsecretaria de Defensa de la Competencia, de Políticas para el Mercado Interno, para que sea restablecida la equidad en la comercialización de productos básicos y esenciales. Miles de empresas supermercadistas PyMEs están en serio riesgo de desaparición y el normal abastecimiento de la población se verá muy afectado si eso sucede", concluyeron desde el comunicado.