Señales que reavivan batallas por inversiones en suelos industriales de la región

Javkin busca acelerar el proyecto de promoción de inversiones en el Concejo. Desarrolladores de parques fabriles sus planes. La opción de la zona franca en Villa Constitución 

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La confirmación de la compra de terrenos para construir una nueva fábrica en Alvear por parte de los italianos de Arneg, pese a los esfuerzos realizados hasta por el propio intendente Pablo Javkin para encontrar un predio en suelo rosarino, ratificaron su firme decisión de avanzar los próximos días con el proyecto para Suelo Industrial y Promoción de Inversiones presentado en la inauguración del año legislativo.

Si bien entienden que la metropolización de Rosario es inevitable, uno de los objetivos trazados desde la campaña por Javkin -y también por otros candidatos- fue plantearse la búsqueda de opciones para frenar la sangría de industrias rosarinas hacia localidades vecinas por trabas burocráticas o costos locales. Y por eso la decisión del Ejecutivo, aún en este contexto de cuarentena, para que el Concejo active el análisis del proyecto de Suelo Industrial para su tratamiento.  

En el último año y medio, por ejemplo, varios de los dueños de los terrenos que bordean la avenida de Circunvalación los acomodaron para que se puedan establecer emprendimientos industriales o depósitos. Algunos de los propietarios tienen previsto encarar proyectos propios, pero otros armaron la infraestructura pensando en la demanda para naves de uso logístico.

Según comentaron fuentes relacionadas con la operación inmobiliaria de Arneg, los directivos de la firma definieron -aún en medio de cambio de gobierno y turbulencias económicas- avanzar con la compra de un terreno para su futura fábrica mayormente con efectivo, contante y sonante. Analizaron  al menos tres predios en Rosario. Pero los dueños de esos terrenos no bajaron sus pretensiones, y finalmente la empresa terminó pagando casi la mitad en Alvear.

En Rosario, la inversión prevista por Arneg, apunta ahora a mejorar la productividad y calidad de las líneas de producción existentes, y fortaleciendo productos como son los paneles para naves industriales.

Los dueños de tierras en parques industriales también reconocen que hay un activo movimiento en el sector en los últimos tiempos después del cambio de gobierno, las restricciones de acceso a moneda dura y las perspectivas de una economía más cerrada. "Actualmente hay un flujo de pesos importante que están buscando activos como predios con los que se terminan dolarizando de otra forma", explicó ayer a Ecos365 uno de los principales jugadores del sector.

"Si hay acuerdo por la deuda, y con una economía más cerrado como a la que nos encaminamos, hay una oportunidad de pensar en ser optimistas y que, en algún momento, se va a reactivar la rueda porque con el actual gobierno se volverá a incentivar la producción o el ensamblaje local", graficó otro de los desarrolladores que decidió reactivar y acelerar al menos uno de sus planes de levantar un parque industrial en la región y no tiene su corazón en el Frente de Todos.

Desde Funes también están viendo estos movimientos. Esta semana autoridades funenses, encabezadas por su intendente Roly Santacroce, funcionarios de la provincia de Santa Fe y los desarrolladores del proyecto del Parque Industrial en Funes recorrieron el predio que tiene como socios a Rosental, Erlij, Fundar y Rossetti. Se analizaron obras privadas y públicas pendientes para volver a salir a corto plazo de nuevo al mercado.

También en estos días hubo reuniones hasta de gremios que pensando en generar puestos de trabajo de la mano de nuevos proyectos industriales, y de ensamblaje, en predios como la zona franca de Villa Constitución, apostando a la sustitución de importaciones sin tener que irse las empresas hasta Tierra del Fuego.

Varios son los empresarios analizan las conveniencias o no de instalarse Villa Constitución, ya que los distintos gobiernos provinciales buscaron impulsar pero que hasta ahora no prosperaron por distintas razones. Por lo pronto, desde el gabinete de Omar Perotti, la zona franca del sur santafesino es un lugar que se pretenden fortalecer con inversiones de distintos actores privados.

Los próximos lanzamientos de líneas de créditos para sectores productivos previstos por el gobierno nacional, las compras de notebook ensambladas en Argentina para docentes y estudiantes a través de planes como el Juana Manso -ex Conectar Igualdad- que tiene previsto ya desde 2020, y esquemas más estrictos en las importaciones -como les confirmaron esta semana a los empresarios de línea blanca- a partir del 15 de julio, exponen hacia adónde pretende apuntar sus políticas Alberto Fernández, más allá del momento que se defina de pospandemia y las dudas del plan económico que se expresan desde el establishment económico. 

Un pantallazo de un relevamiento entre las empresas que encararon las autoridades de gobierno de la región, y que aún no está terminado, surgió que de las primeras 150 empresas que contestaron, la mitad tiene intenciones de tomar algo más de personal. "Esto es un contexto en el que seguramente una vez que se retiren los respiradores artificiales de ATP para las empresas e IFE veremos, probablemente, una aceleración de despidos en distintos sectores", aclaró el funcionario, que pasa la mayor parte de su jornada en estos días atendiendo a empresas de sectores que aún no abrieron o tienen permisos y protocolos que las transforman en inviables económicamente. 

Sin embargo, esos primeros números de la encuesta le hacen preguntarse si, pese a que las proyecciones económicas para el segundo semestre no son halagüeñas,  se está frente a una desaceleración de la caída de la actividad, si se puede vislumbrar un piso después del brutal retroceso registrado en estos meses de plena cuarentena por la pandemia del Covid-19 o apenas es un oasis en una economía que continúa descendiendo por un tobogán.

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