El segundo semestre del 2018 fue el peor de los últimos seis años en metros cuadrados solicitados para construir viviendas en Rosario. Si bien los permisos presentados en el área de Obras Particulares municipal marcaron récord en la segunda mitad del año comparado con lo que ocurrió en el último lustro, sólo expone que se tratan de pedidos de pequeñas obras y/o reformas, pero que poca incidencia en el número global del rubro de la construcción.

Los permisos solicitados de metros cuadrados para construir viviendas fueron 136.363 metros en el segundo semestre de 2018, lo que significa un desplome del 29% respecto de igual período de 2017. La mayoría de los proyectos se concentraron en los distritos Centro y Norte.

En tanto, la cantidad de permisos ingresados fueron 912 durante el segundo semestre del año pasado, lo que arroja un promedio de 286 metros cuadrados por obra, un 30% por debajo del promedio histórico de los últimos seis años.

La segunda mitad de 2018 también fue un período en el que se frenaron, en paralelo, el inicio de muchas de las autorizaciones ingresadas en la primera mitad del año, reconocieron referentes del sector de la construcción de viviendas.

Esto se ve en todas las referencias estadísticas de actividad económica. Por ejemplo, la construcción en Rosario comenzó a mostrar desde junio pasado una caída en la facturación –medido a valores constantes- y se fue pronunciando mes a mes al punto que en noviembre –en breve se conocerán los de diciembre- cayó 10,3%. Así se desprende del relevamiento que realiza mensualmente el Centro de Información Económica (CIE) de la Secretaría de Producción municipal en base al pago del Derecho de Registro e Inspección (Drei).

Vale recordar que las autorizaciones tienen una vigencia de tres años.

Por eso, los referentes del sector apuntan a que la realidad de la construcción hoy es lo sucedido en el segundo semestre en lugar de mirar lo que ocurrió a lo largo de todo el 2018. En este sentido, cuando se mira la cantidad de metros cuadrados solicitados en el 2018 (579.934), en el área de Obras Particulares de la Municipalidad, arroja que crecieron un 18% en la comparación interanual, incluyendo los permisos para la construcción de locales, que tuvieron un retroceso pero menos pronunciado.

Los privados solicitaron permisos para construir 83.817 metros cuadrados para locales comerciales en el segundo semestre de 2018, lo que representa una caída del 5,3% comparado con el mismo período de 2017.

“Fue así porque hasta la sequía que sufrió el agro la construcción mostraba números positivos, a lo que se le sumó la corrida y todo el mundo puso el pie en el freno”, explicó un histórico constructor que reconoció que prevé esperar a marzo/abril a ver cómo sale la cosecha de soja a para definir si arranca con uno o dos edificios en 2019. “Otra cosa no hay. Es año de elecciones y encima no hay crédito”, agregó.

Los datos de la construcción en la región en general se muestran menos catastróficos que la media nacional porque hubo un sostenimiento del nivel de obras públicas y eso explica, en parte, porque no se registra una caída del empleo en el sector.