Las ciudades avanzan hacia un esquema inteligente

El desafío de los gobiernos pasa por gestionar con eficiencia el día a día de las ciudades que dirigen. La tecnología es el camino para alcanzar objetivos en pos del bien común. Análisis de Fernando Ruffo, Gerente de Producto de FiberCorp

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Las grandes ciudades son cada vez más objeto de estudios y debates en la mayoría de los países del mundo. Su crecimiento es constante, la migración de las áreas rurales hacia los centros urbanos es un fenómeno que, al menos por ahora, no parece que fuera a detenerse. En este escenario, la necesidad de abordar a las ciudades bajo el concepto de “inteligentes” es inevitable. La tecnología es el camino para resolver las problemáticas que se plantean de manera cotidiana en todos niveles.

Para el año 2050, más del 70% de lo población vivirá en zonas urbanas, según datos de la Organización de Naciones Unidas (ONU). Internet de las cosas (IoT) se propone como la tecnología que permitirá tratar las diversas cuestiones que hacen al movimiento de una ciudad: la movilidad y el transporte, la energía y su sustentabilidad, la gestión del agua, los trámites de los ciudadanos, la administración de recursos en el ámbito de la salud y de la educación. La lista es mucho más larga.

Los gobiernos son los responsables de liderar la transformación de las ciudades en digitales. La proyección y planificación forman parte de su área de decisión. Pero es el sector privado el que debe responder a esas demandas nuevas que surgen, justamente, de las necesidades de la población.

Las empresas que ofrecen soluciones de IoT que permiten optimizar la gestión de recursos por la vía del ahorro, la eficiencia y la productividad, serán las mejor preparadas para acompañar a los estados en los procesos de transformación digital que requieren las ciudades. Aquellas compañías capaces de diferenciarse por brindar innovación y servicios flexibles, ágiles y autogestionables responderán mejor a la demanda ciudadana.

Aquellas compañías capaces de diferenciarse por brindar innovación y servicios flexibles, ágiles y autogestionables responderán mejor a la demanda ciudadana.

Digitalizar procesos

La digitalización no es una opción a futuro. Es un proceso que ya ha comenzado, hay ciudades que ya son ejemplo en materia de la “inteligencia” aplicada a sus procesos y al mejor funcionamiento de su día a día. Por ende, su adopción tiene que ser la prioridad de cualquier ciudad que busque alcanzar el éxito en un mundo que ya es digital.

Las empresas que forman parte del sistema inteligente que adoptan y continuarán adoptando las ciudades, deberán brindar servicios flexibles y escalonados. De eso depende que sus prestaciones tengan un precio acorde al que, a su vez, pagan los ciudadanos por los servicios que reciben de los estados que ellos mismos sostienen.

Este es un camino posible para avanzar en las ciudades inteligentes. Un estado que toma la decisión de mejorar el funcionamiento diario de la ciudad en sus distintos niveles, que es abastecido por empresas que cuentan no sólo con la tecnología más idónea para responder a cada necesidad, sino que, además, aplica procesos que le permiten mantenerse al día con las innovaciones.

La rotura de un caño de agua con el consiguiente problema que eso representa para el tránsito, por un lado, y el abastecimiento continuo, por el otro, sin olvidar del cuidado que exige este recurso, puede gestionarse de una manera más rápida y eficiente mediante soluciones que combinen diversas tecnologías, a saber:

Con ellas dos es posible tomar decisiones en materia de monitoreo ambiental, por el impacto que puede tener la rotura del caño en la comunidad en que se inscribe. A su vez, se envía rápidamente una cuadrilla de emergencia para comenzar a trabajar en la solución del problema. Esto se combina, al mismo tiempo, con las soluciones de gestión de movilidad que permitirán derivar el tránsito por vías alternativas y evitar así los embotellamientos imprevistos.

El monitoreo en tiempo real de cada una de estas variables asentado, a su vez, en una conectividad robusta y estable que provea la información en tiempo real, resulta clave ya no sólo para la resolución rápida del problema sino también para que las pérdidas que éste genera sean menores. Y redunde, al final, en un mejor servicio para el ciudadano.

Integración para la agilidad

Los imponderables son cosas de todos los días en las ciudades. De modo que la opción pasa por contar con herramientas que permitan resolver rápidamente los incidentes. Eso también implica una mejor gestión de los recursos,  humanos y materiales.

Para cumplir con este punto también resulta fundamental que los proveedores tecnológicos sean integradores del portfolio de soluciones que ofrecen. Pues es la manera de garantizar que la solución a aplicar frente a cada situación sea la que mejor se adapte al problema y que el equipo a cargo de ello cuente con la experiencia necesaria para su implementación.

Las ciudades, en su crecimiento exponencial, presentan complejidades, a veces extremas. La buena noticia es que la tecnología, bien aplicada, puede ayudar a resolver cada uno de los problemas que surgen. Y que la evolución que hoy muestran permite llegar a la conclusión de que no hay razón para no pensar en que muchos de ellos se puedan resolver de manera definitiva.

En este camino, parte de la responsabilidad de los proveedores de servicios es explicar, orientar y mostrar las ventajas y recaudos de la adopción de nuevas tecnologías. Un valor que cualquier gobierno tendrá en cuenta a la hora de tomar las decisiones vinculadas con la gestión de las ciudades de una manera inteligente.

Como integradores de soluciones, en FiberCorp-Telecom seleccionamos las mejores plataformas para cada una de las necesidades y las integramos con nuestras fortalezas: la conectividad, la ciberseguridad y el procesamiento de datos. Así, respondemos a los problemas que hoy presenta cualquier ciudad, sin importar su tamaño.

Las ciudades evolucionan hacia un esquema inteligente porque deben ser más eficientes y sustentables. Y las empresas debemos saber cómo responder a las exigencias que imponen los tiempos digitales.

Por Fernando Ruffo, Gerente de Producto de FiberCorp | Telecom

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