En tiempos en que los brotes verdes se cuentan con los dedos de una mano, Venado Tuerto recibirá dos grandes inversiones relacionadas con proyectos de energía renovable a partir de biomasa. Ambas iniciativas totalizan un desembolso global por 45 millones de dólares y se calcula que generarán más de 400 puestos de trabajo.

Los emprendimientos -enmarcados en el programa nacional RenovAr- eligieron a la localidad del sur santafesino por su ubicación estratégica, en pleno corazón de un polo semillero en el que operan las principales empresas del sector, que serán quienes aporten el insumo principal para el proceso productivo. Asimismo, el biodigestor que instalarán generará un subproducto de preciado interés para la zona: un fertilizante fácilmente comercializable en las explotaciones agrícolas del entorno.

El más ambicioso de los proyectos es el de la firma Biomasa Venado SA, que a través de una inversión de 35 millones de dólares construirá una planta con una potencia de 7 MW que estará operativa para finales de 2020.

La operatoria es realizada de manera conjunta por ADBlick Agro y BAS-Dominion, una alianza argentino española con fuerte presencia en el mercado eléctrico nacional (para los próximos cinco años prevén desembolsos por más de 300 millones de dólares).

Además de utilizar los subproductos de la industria semillera (ya tienen acuerdos con las cuatro más grandes: Dow AgroSciences, Nidera, Tecnoseeds y Syngenta), el biodigestor utilizará la biomasa vegetal que generan la poda en los municipios y comunas de la zona.

Juan Pablo Carreras, gerente de negocios de ADBlick Agro, confirmó que en paralelo al de Venado Tuerto la firma está desarrollando un emprendimiento en Rojas: "Ambas localidades las elegimos por una cuestión logística, para reducir los costos pues en ambos casos se encuentran los principales polos de semilla de maíz del país", indicó.

El ejecutivo, quien afirmó que el comienzo de las obras está planteado para inicios del año próximo, informó además que ya realizaron la firma del contrato con Cammesa, a la que le venderán la energía a un precio de 107 dólares por MWh.

El otro proyecto que empezará a tomar cuerpo en breve es el encarado por Seeds Energy Group (una empresa del ex banquero Andreas Keller Sarmiento), que tendrá una potencia de entre 3 y 4 MW, lo que representa al 5% de la energía que necesita la ciudad de Venado Tuerto. En este caso la inversión alcanza los 10 millones de dólares.

De la misma forma que en el primer caso, la iniciativa tendrá otro modelo “en espejo” en la localidad bonaerense de Pergamino. Según informó la firma, la planta estará lista para fines de 2019 y tendrá un impacto positivo en las emisiones de dióxido de carbono equivalente a 1.450.000 litros de combustible.

El gerente de Seeds Energy Group, Héctor Tamargo, destacó el carácter multiplicador de la inversión -ya que se calcula que generará 3 empleos indirectos por cada uno de los puestos directos-, al tiempo que subrayó la producción de un fertilizante de alto valor nutriente.

"Las posibilidades que brinda el biogás son muy grandes, no solo para el polo semillero sino para todo el país", aseveró.

La tecnología que se utilizará para la construcción del biodigestor será provista por la italiana IES Biogas, que cuenta en su haber con más de 18.000 plantas en todo el mundo.

En la provincia, la firma desarrolló el equipamiento que utiliza Adecoagro en su tambo en Christophersen: allí la empresa que conduce Mariano Bosch está invirtiendo 60 millones de dólares en un proyecto que incluye no solo la ejecución de un segundo biodigestor sino también la duplicación de su rodeo.