El paquete de leyes impositivas y de emergencia que el gobernador de Santa Fe, Omar Perotti, envió a la Legislatura provincial, dio el primer paso en el Senado con la media sanción de ambos proyectos. El próximo lunes será el turno de la Cámara de Diputados.

El gobierno provincial logró en el Senado que avanzara la mayor presión fiscal sobre las cerealeras y las entidades bancarias, aunque con modificaciones en la alícuota enviada a la Legislatura. También se aprobó una actualización del impuesto inmobiliario rural -con un techo del 65%- y urbano y de la patente automotor.

La alícuota de ingresos brutos sancionada para las entidades bancarias será del 7% para aquellas cuya facturación supere los $4.500 millones anuales, pero se baja al 5,5% a las que no lleguen a ese techo. Básicamente se prosperó la idea de diferenciar a pequeños bancos como el Municipal y cooperativas.

El gobierno provincial también logró la la media sanción de las declaraciones de emergencia en materia alimentaria, de salud, económico-financiera y de seguridad y la sanción definitiva para la suspensión del Consenso Fiscal firmado por Santa Fe con la Nación.

Con todo, el gobierno de Perotti logró una primera importante victoria después de sellar un acuerdo con los seis senadores rebeldes, encabezado por Armando Traferri, que le permitió destrabar las leyes impositivas y de emergencia. Más si se piensa que las veces que el Frente Progresista buscó gravar a las cerealeras se encontró con el rechazo de los senadores peronistas. 

Ahora será el turno de la Cámara de Diputados, donde el oficialismo se muestra confiado con la sanción de la ley de reforma tributaria, pero reconoce que ve difícil que prospere la emergencia.

Desde el Frente Progresista rechazaron ambas iniciativas del gobierno pero podrían habilitar la sanción definitiva de la ley impositiva.

Desde el oficialismo festejaron la sanción de la ley impositiva. "Nos decían que éramos conservadores, pero fijate que logramos que avanzara con la imposición de ingresos brutos a las cerealeras y grandes bancos", resaltó un importante miembro del Ejecutivo.

El vocero del gobierno provincial, Leonardo Ricciardino, resaltó que “se trata de un paquete de medidas basado en un fuerte compromiso social y solidario”.

También resaltó que “es un claro programa de austeridad y equilibrio fiscal que tiene como objetivo disponer de los recursos necesarios para garantizar los programas sociales y alimentarios, priorizar el correcto funcionamiento del sistema de salud y brindar mayor seguridad”.