Desde nuestro espacio entendemos que todos los niveles del Estado deben involucrarse fuertemente en la regulación de la actividad económica, de manera de garantizar el acceso de todos los rosarinos y rosarinas a un trabajo digno. Rosario necesita crear cada año alrededor de 6 mil puestos de trabajo sólo para dar empleo al crecimiento de su población. A su vez, este número prácticamente se duplica en años de crisis como el 2018 donde más rosarinas y rosarinos se vuelcan al mercado laboral en buscar de otra fuente de ingresos que les permita palear la recesión. Por ello se requiere un doble rol por parte del Estado, ya sea trabajando para crear los futuros empleos que requieren nuevas aptitudes o también procurando tomar las medidas necesarias que la recesión económica impone.

Indudablemente en el ámbito municipal se dispone de herramientas más limitadas para intervenir sobre la economía que en los otros niveles del Estado, sin embargo, su alcance acotado no implica una menor importancia. La Municipalidad tiene mucho terreno para planificar, ejecutar y controlar políticas tendientes al desarrollo económico y social de la ciudad.

Sin lugar a dudas, nuevas realidades van dando lugar a demandas más complejas que requieren el diseño de nuevos planes con nuevas respuestas. No obstante, en muchos otros casos Rosario ya ha llevado a cabo los procesos de discusión colectiva de los cuales han surgido una planificación estratégica que hoy requiere ser puesta en marcha o sencillamente su ejecución debe ser controlada. Muchas de las ideas aquí vertidas no son nuevas, originales o de autoría propia sino que incluso constituyen normas vigentes que el Departamento Ejecutivo Municipal ha decidido no poner en práctica por haber surgido de otros espacios políticos. Rosario sabe bien que el desarrollo de la ciudad requiere consensos entre los diferentes actores políticos, económicos y sociales y el futuro de la ciudad depende de volver a alcanzarlos. Juntos.

1. 1. Trabajo Registrado y Cualificado

Dada la compleja realidad que vive nuestro país en general y la ciudad de Rosario en particular, entendemos que es imperioso jerarquización de la cuestión laboral dentro de la estructura del Departamento Ejecutivo Municipal. El año 2018, fue el primer año en mucho tiempo donde disminuyó el empleo registrado en nuestro país ya que ante la fuerte destrucción de puestos de trabajo en el sector privado, el sector público no desempeñó un rol contracíclico y actúo de manera absolutamente pasiva. Al mismo tiempo, no sólo se destruyen fuentes laborales sino que también la calidad de los puestos de trabajo se encuentra fuertemente afectada. El crecimiento exponencial del cuentapropismo y el hecho de que en 2015 haya sido el último año donde se redujo el empleo no registrado en Argentina son dos ejemplos concretos de lo acuciante de la realidad actual.

En este contexto, la ciudad de Rosario es una de las más afectadas en materia laboral, habiendo presentado la mayor tasa de desempleo en el país en el cuarto trimestre de 2018 (12,8%). Esto último implica que dicha problemática alcanza a más de 78 mil rosarinos y rosarinas, quienes sufren las consecuencias del desempleo que azota nuestra ciudad. El salto increíblemente brusco en la desocupación en el último trimestre de 2018, en 5,2 puntos porcentuales (el mayor incremento desde la crisis del tequila en 1995), hizo que la ciudad asista al nivel más elevado de esta tasa en trece años.

Si se contempla la situación de los subocupados que no tienen la posibilidad de encontrar un mejor trabajo a pesar de que lo busquen activamente (9,9%), es posible concluir que hoy casi 1 de cada 4 rosarinos padece de serios problemas laborales y necesitan que el Estado les dé una respuesta. Al mismo tiempo debe ser tomada en cuenta la situación de aquellos que teniendo un trabajo no se encuentran registrados y que nuevas formas de empleo o el surgimiento de las mal llamadas economías colaborativas esconden formas precarización que requieren mejores y más ingeniosos controles por parte de los diferentes niveles del Estado, requiriendo en muchos casos las reformas organizativas correspondientes de manera de llevarlos a cabo. Por todo ello, proponemos la creación de la Secretaría de Trabajo en el ámbito de la Municipalidad.

Esta secretaría será la encargada de articular políticas con sus homónimas de otros niveles del Estado de manera de ejercer el poder de policía en el ámbito laboral de la ciudad de Rosario. Es inadmisible que 1 de cada 3 trabajadores rosarinos no se encuentren debidamente registrados. Ese piso difícil de vencer que parece el 33% de trabajo no registrado, debe ser quebrado. Ya en 2014 y preocupados por esta problemática, el Concejo Municipal sancionó la Ordenanza N° 9.369: “Rosario contra el empleo informal”. Por intermedio de esta se jerarquiza el Registro Público de Empleadores con Sanciones Laborales (REPSAL) creado a nivel nacional en el ámbito municipal, a través de la aplicación de sanciones para concesionarios en contravención a la normativa laboral vigente, se establece la gratuidad de las cuentas en el Banco Municipal para los sectores más castigados por la informalidad (trabajadores y trabajadoras de casas particulares y construcción) y finalmente se disponen beneficios impositivos para aquellas empresas que participen de programas oficiales de capacitación. Vale remarcar, la Ordenanza nunca fue aplicada y estos beneficios nunca fueron promocionados.

Capacitación para el Trabajo

El rol de del Municipio en materia de capacitación es de una importancia mayúscula y debe trascender la aplicación de los beneficios impositivos mencionados. Se requiere una capacitación para el trabajo planificada, coordinada y descentralizada.

Así, entendemos que la oferta de capacitación debe ser adecuada a las necesidades actuales de las empresas y al mismo tiempo se deben eficientizar el uso de recursos públicos evitando el solapamiento entre los diferentes niveles del Estado, con una mejor coordinación entre los mismos pero, fundamentalmente, articulando con sector privado donde deben insertarse aquellos beneficiarios de la capacitación. Para esto es necesaria la puesta en marcha de una Mesa de Competitividad tal como fuera planteado en el Plan Estratégico para 2018 y que dentro de sus objetivos se encuentre el de coordinar los esfuerzos de los diferentes actores en materia de capacitación para el trabajo.

En cuanto a la descentralización, creemos que es el paso más necesario y más postergado por parte de la Municipalidad de Rosario. Esta demoró demasiado en dar un paso en ese sentido, el cual llegó recién en abril de 2016 a través de la descentralización de la oficina de empleo en los distritos. En este contexto vale preguntarse si no perdió tiempo valioso ya que luego de más de una década de crecimiento industrial en nuestro país, se descentraliza este sector del aparato estatal municipal recién cuando cambia el panorama económico nacional y las empresas comienzan a preocuparse por no despedir más que por contratar trabajadores.

Creemos que se debe dar un paso más allá y avanzar en una verdadera descentralización en materia de capacitación para el trabajo y que la misma implicaría un real acceso por parte de los rosarinos y rosarinas. En los barrios de nuestra ciudad se multiplican las demandas en este sentido ya que actualmente se hace muy difícil acceder a los cursos ofrecidos por la distancia a recorrer hasta el centro de capacitación, ya sea por cuestiones monetarias ante el elevado costo del boleto o por dificultades inherentes a la seguridad como salir del curso ya de noche y con servicio deficiente de transporte (lejanía a la parada o mala frecuencia).

Esto queda en evidencia cuando se analiza la diversificación territorial de la capacitación ofrecida por la Municipalidad. En el siguiente gráfico se presentan los cursos a llevarse a cabo en 2019.

Puede verse con facilidad como la mayoría de los cursos son dictados por instituciones localizadas en el centro y macrocentro de la ciudad. Esto a su vez, no tiene su causa en la falta de las instalaciones pertinentes ya que se da en un marco donde el Estado cuenta con una gran cantidad de infraestructura inutilizada en muchos casos y sub-utilizada en otros. Es sumamente necesario que la oferta de cursos llegue a los barrios y esto puede llevarse a cabo a través de una mayor utilización de los Centros de Convivencia Barrial (CCB) o incluso a través de convenios con escuelas técnicas del Estado Provincial. Una descentralización real como la que se propone permitirá aumentar la efectividad de los cursos brindados al incrementar la proporción de jóvenes que completan el curso. El bajo ratio entre quienes se inscriben, son aceptados y efectivamente finalizan la capacitación es un aspecto sobre el cual se debe trabajar fuertemente.

Hoy en el Gran Rosario hay 55 mil jóvenes de entre 18 y 29 años que no estudian ni trabajan, 35 mil de los cuales no trabajan pero tampoco buscan trabajo. Rosario no puede resignarse ante esta situación. Así como el Estado debe ir a buscar a su casa a cada niño que termina la primaria a principio de año para garantizar su ingreso en la escuela secundaria, también debe buscar a cada joven que termina la secundaria y capacitarlo efectivamente para el trabajo. Los trabajos registrados en los sectores más competitivos de nuestra economía cada vez requieren una mayor cualificación y allí debe estar el Estado.

Compras públicas para el desarrollo y microemprendedores

El Estado debe gestionar sus compras públicas de manera más eficiente pero a su vez con objetivos estratégicos. No sólo hay que mejorar elementos del circuito de pagos a los proveedores quienes actualmente deben soportar financieramente sobre sus espaldas plazos de pago excesivamente largos por parte de la Municipalidad sino que también hay que atender cuestiones apuntadas al mediano y largo plazo. Las compras públicas son un elemento de desarrollo económico imprescindible. A través de las compras públicas debe fortalecerse e incluso, fomentar desde cero, las capacidades productivas de un determinado territorio. A modo de ejemplo puede citarse a Mazzucatto, economista de moda a nivel mundial, quién demuestra como la gran mayoría de los elementos que componen el Iphone tienen origen en inversiones y compras llevadas a cabo por el Estado.

Sin irnos tan lejos, a nivel local hay muchos aspectos sobre los cuales trabajar. En primer lugar, es importante desarrollar capacidades de proveedores locales en diversos ámbitos. En materia de producción de software y aplicaciones públicas hay innumerables oportunidades.

La aplicación de transporte es un ejemplo cabal del tema, la misma fue desarrollada por una empresa multinacional de capitales argentinos lo cual podría haber sido entendible dadas las capacidades existentes en ese momento en la ciudad, pero luego el Ente de la Movilidad ha tomado para sí los desarrollos nuevos de la aplicación y las quejas de los usuarios se han multiplicado.

El Estado parece comprar a grandes empresas el producto o desarrollarlo por sí mismo, sin puntos intermedios. Los trolebuses comprados en Rusia escudándose en la autonomía de los mismos constituyen otro ejemplo. Los del oferente local, cuyo precio era sustancialmente más económico, no disponían de la autonomía necesaria pero, ¿en algún momento se pensó en invertir en nuevas catenarias? ¿Si todo ese proceso era más costoso, no habría que haber computado las ganancias derivadas de mayor empleo local o mejores capacidades productivas? ¿Todo eso implicaba también tiempo y el apuro electoral terminó triunfando?

Por otro lado, la Municipalidad de Rosario debe generar un entramado de microemprendimientos que sean proveedores estatales y que mediante un primer impulso del Estado logren una mayor formalización de sus actividades. De esta forma, se debe apuntar a que y no sólo tengan la función de dar sustento a los emprendedores que los llevan a cabo sino que además de la mayor formalización puedan incrementar la escala de su producción, dar empleo y que la supervivencia del emprendimiento trascienda su rol de proveedor de la Municipalidad. Atendiendo a ello, en el Concejo Municipal hemos presentado un proyecto para particionar los pliegos en determinados rubros definidos en conjunto no sólo por la Secretaría de Economía Social sino también la de Producción, dado que miramos a este tipo de emprendimientos por su rol social pero fundamentalmente y por sobre todas las cosas por su rol productivo. Al mismo tiempo, el proyecto contempla la bancarización de estos emprendedores y la gratuidad de los pliegos para facilitar su acceso.

Financiamiento productivo

Creemos firmemente en la necesidad de fortalecer el rol del Banco Municipal, del cual estamos plenamente orgullosos y al mismo tiempo, somos conscientes de la necesidad de ampliar su escala de operaciones. Por esto impulsamos que el BMR elabore una propuesta y se presente a la licitación para actuar como agente financiero del Estado Provincial ante el vencimiento de la actual licitación. Entendemos que se perdió una oportunidad valiosa y que esto se debería haber previsto incluso en 2014, en oportunidad de la prórroga del contrato.

Si bien por cuestiones de escala podría haber habido algún tipo de cuestión operativa a salvar, el banco podría haberse hecho cargo de aunque sea una fracción de las operaciones lo cual habría implicado, con la pertinente capitalización mediante, un salto de calidad en el volumen de la operatoria del banco tal como fue en su momento la captación del los depósitos judiciales que hoy implican más del 32% de los depósitos totales de la institución, con un volumen superior a los $2 mil millones.

El incremento en el volumen del BMR hubiera permitido a su vez que su operatoria se vuelque a un perfil de más largo plazo y orientado a financiar la producción local. Hoy el banco se encuentra orientado a financiar el consumo o a la Municipalidad a través del descuento de documentos emitidos por sus proveedores. De esta manera, el 47% de la cartera de crédito del banco se orienta directamente al consumo, mientras que la cartera destinada al consumo del sistema financiero argentino en su conjunto es del 38%. Vale aclarar que este porcentaje es ya de por sí alto y es rasgo característico de nuestro sistema financiero que desde ya hace mucho tiempo es de pequeña dimensión y orientado al corto plazo.  

Como contracara de la preponderancia de los créditos personales se encuentra la ausencia de créditos otorgados con garantías. Este conjunto de créditos debe crecer de la mano de la ampliación de la operatoria del BMR y expandirse por sobre el imperceptible 1,3% actual. El sistema a nivel agregado mostró niveles similares luego de la crisis de 2002 y luego de ella, el porcentaje más bajo de créditos con garantías fue durante 2009 con un 3,5%.

Con lograr ampliar este tipo de crédito en el BMR a un 8% del total (la mitad que la tiene el sistema en su conjunto), estamos hablando de volcar al desarrollo económico local un stock de créditos de alrededor de $680 millones.

Finanzas Eficientes, Transparentes y Participativas

Las cuentas municipales hace ya mucho tiempo vienen mostrando un déficit sistemático. El problema en sí no es tanto el hecho de que exista déficit sino su elevado volumen que durante el mandato de la actual intendenta representó en promedio el 7,18% de los recursos corrientes y como contracara de este desfasaje entre ingresos y gastos se dio durante la actual gestión un incremento pronunciado del stock de deuda. La misma aumentó un 27% en términos reales y los números actuales no son de una gravedad mayor debido a que el Concejo Municipal se opuso a la toma de deuda en dólares propuesta por Mónica Fein, lo que hubiera complicado severamente las finanzas municipales de la próxima gestión.

Un cuestionamiento recurrente por parte del sector privado es que se hará en una futura gestión para reducir la carga impositiva municipal. No creemos en hacer propuestas demagógicas en momentos donde la recaudación presenta caídas del orden del 8% en términos reales sea lo de adecuado.

Sin embargo, si podemos decir que hicimos precisamente para evitar que la presión tributaria real aumente en la ciudad y un ejemplo concreto es el hecho de haber evitado el endeudamiento en dólares. De haber prosperado el proyecto original la Municipalidad debería haber devuelto 200 millones de dólares de capital entre 2022 y 2024.

Es decir, de aquí a menos de 3 años el próximo intendente debería haber erogado un monto que hoy es casi 2 veces la totalidad de la recaudación del DReI. En concreto, puede pensarse que quién tuviera que devolver la deuda contraída debería haber duplicado las alícuotas de DReI por dos años.

Finalmente, creemos en la necesidad de relanzar el presupuesto participativo (PP) que fue una gran iniciativa en sus inicios y que el propio oficialismo se encargó de ir disolviendo con el paso de tiempo. El porcentaje que por Ordenanza establece que el PP debe ser igual al 5,19% del gasto total debe respetarse. En la actualidad el monto de $380 millones representa el 1,56%.

Si se respetaran esos porcentajes, el PP contaría con alrededor de $900 millones más para ser asignados de acuerdo a la voluntad de los vecinos. En concreto, el distrito sudoeste podría haber asignado $147 millones más en su territorio de acuerdo a sus necesidades. Algo así como el valor de 19 piletas olímpicas que tanta falta le hacen a barrio Las Flores.

Propuestas sectoriales

Por otro lado, proponemos llevar a cabo diversas obras enmarcadas en nuestras propuestas sectoriales para cada uno de los sectores económicos de la ciudad:

Parque industrial público: Hoy hay más de 140 parque industriales públicos gestionados directamente por municipios y algunos más gestionados de manera mixta entre municipios y privados. Una ciudad del tamaño y la potencia de Rosario no puede no tener su propio parque industrial.

Impulso a la industria turística: Desde hace años venimos bregando por diferentes obras para potenciar a la ciudad, es así que impulsamos que la construcción del techo para las gradas del Anfiteatro Humberto de Nito; también disponer de un estadio cubierto similar al Orfeo de Córdoba; por su parte pretendemos explotar también el ecoturismo, aprovechando los terrenos que Rosario cuenta en las islas del Charigüe, y que hemos propuesto crear una Reserva protegida. También hemos presentado un proyecto de creación de un autódromo metropolitano, donde Rosario juega un rol fundamental en cuanto a alojamientos y gastronomía. Debemos continuar al mismo tiempo potenciando a Rosario como polo de convenciones e incrementar la agenda deportiva. En ese sentido debemos crear la infraestructura necesaria para constituir a Rosario como una referencia regional en la materia, lo que sin dudas contempla la necesidad imperiosa de la ciudad de contar con instalaciones para el medio y alto rendimiento deportivo. Por último, en referencia a la infraestructura en materia de turismo y ocio no se puede dejar de mencionar que hoy ni siquiera se cuenta con instalaciones que ya existían en la ciudad: una ciudad como Rosario no puede no tener un parque de diversiones.

Facilitar la habilitación de nuevos comercios: Las habilitaciones deben desburocratizarse al máximo y los gastos iniciales de los pequeños comercios financiados por el Banco Municipal.

Promoción de los servicios basados en el conocimiento: a largo plazo Rosario tiene que pensar su estrategia de desarrollo económico y social y este sector debe ser unos de los pilares. Por eso presentamos en el Concejo un proyecto para reintroducir los beneficios impositivos (dados por la exención del DReI) para la Industria del Software de manera de comenzar la discusión sobre la promoción local de la Economía del Conocimiento.

Shock de obra pública en los barrios: La ciudad requiere de un fuerte impulso en los lugares que el socialismo ha postergado y que a su vez representaría un fuerte impulso a la construcción.