Dell y Microsoft anunciaron una alianza el lunes pasado en el Dell Tech World en Las Vegas cuyo objetivo, posiblemente, sea ganarle a Amazon Web Services (AWS).
El anuncio une a las dos compañías -Microsoft que ya superó el market cap de US$ 1 B y Dell que este año arañó los US$ 27.000 M- y se basa en la colaboración: ahora los clientes de Azure, la nube de Microsoft, podrán utilizar las herramientas de virtualización de VMWare, parte del grupo Dell desde que se hicieron con la federación de compañías en 2016 por US$ 67.000 M, mucho de lo cual se hizo con deuda que tomaron en los mercados para manejar sus operaciones de IT.
En concreto, el acuerdo es similar al que había accedido AWS en 2016 cuando VMWare todavía no pertenecía al conglomerado que maneja desde siempre Michael Dell: en ese momento los clientes de AWS podían usar software de la empresa de virtualización para unificar plataformas.
Hoy, la tendencia es la posibilidad de utilizar múltiples plataformas en la nube, así como data centers para tener una solución completa y a medida. Esto requiere el trabajo adicional de que los distintos sistemas "hablen entre sí".
De forma creciente, las grandes firmas se están poniendo de acuerdo para colaborar y eliminar así ese problema.
"La gente nos estaba pidiendo que trabajemos juntos. Nuestros clientes son los mismos y si quieren usar Azure y quieren usar VMWare hay que hacerlos compatibles", dijo Pat Gelsinger, CEO de VMWare.
"Siempre que nos juntabamos era para hablar del negocio de PC pero al final la gran alianza vino por otro lado; había mucha demanda", reconoció Michael Dell que con la adquisición del grupo EMC revitalizó su negocio moviéndose al entorno de tecnología para empresas, conocido como Enterprise.
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