Bares y restaurantes rosarinos piden abrir al 50% de capacidad después del 24 de mayo

Se quejan de la posición dominante de las app de delivery en esta cuarentena, que cobran comisiones de hasta el 37%. Y piden rever las tarifas de la recolección diferenciada de residuos

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Bares y restaurantes de la ciudad piden abrir al 50 por ciento de su capacidad después del 24 de mayo, fecha en que se podría cambiar a la fase 5 de la cuarentena social obligatoria. La fecha de reapertura para que los comensales puedan volver a sentarse a consumir en los comercios todavía es incierta. 

Representantes de la Asociación Empresaria Hotelero Gastronómico y Afines de Rosario (Aehgar) mantuvieron una reunión virtual con el intendente, Pablo Javkin, donde plantearon una reapertura escalonada como uno de los ejes principales para el sector. También se discutió acerca de la posibilidad de tomar medidas en relación a tasas e impuestos en todos los niveles, así como recolección diferenciada de residuos. Los planteos quedaron en estudio y esperan una próxima devolución por parte del intendente. 

"Hay impuestos que tienen mínimos, como el Drei, que son difíciles de pagar en un contexto donde los locales están cerrados. La TGI se torna difícil, principalmente para los hoteles por su dimensión. También la recolección diferenciada de residuos que hay que pagar, cuando no se están generando residuos y estamos sosteniendo el servicio", explicó Alejandro Pastore, miembro directivo de Aehgar y referente del Paseo Pellegrini y agregó: "Son cosas diarias que engrosan el déficit y hay que ver cómo resolvemos". 

Desde el sector presumen que -si las estadísticas de contagio continúan bien- podrían abrir el lunes 25 de mayo, con menor caudal del factor ocupacional. Gastronómicos es uno de los pocos sectores que queda pendiente de reabrir en la ciudad. 

"Todo es día a día, pero la idea es evaluar la situación para ver en qué instancia se puede dar la reapertura de locales gastronómicos, teniendo en cuenta el proceso de apertura de comercios minoristas y la evolución de la pandemia en la ciudad", explicó Pastore.

"Estamos pidiendo una apertura, pero también de una manera muy cautelosa porque tienen que estar dadas las condiciones sanitarias generales en la ciudad", dijo y agregó: "Por ahora la evaluación es positiva y es oportuno empezar con aperturas al 50% de la capacidad, con los protocolos de higiene específicos con los que trabajamos". 

Otra de las preocupaciones del sector es que, en caso de reabrir, dependerán también de la reacción del consumidor. Antes de la cuarentena obligatoria, bares y restaurantes trabajaron por una semana con capacidad al 50%, pero que rápidamente cayó a menos del 25%, previo al decreto de aislamiento.

Paseos gastronómicos, como Pellegrini y Pichincha, realizaron encuestas a través de redes sociales y, en líneas generales, un 50% de las personas tendría intenciones de salir, en la medida en que se den las condiciones sanitarias. 

"Hay que ver cómo se recuperan los hábitos de consumo del público, trataremos de dar todas las garantías para que la gente venga a disfrutar de una salida", sostuvo Pastore. 

La situación económica del sector gastronómica es crítica: el saldo de la modalidad delivery no es suficiente para solventarse en la mayoría de los casos e, incluso ante la posibilidad de reabrir, trabajar a la mitad de capacidad tampoco resuelve los costos fijos del negocio. 

Aplicaciones de delivery

Según explicó Pastore, el 90% de la comercialización se da a través de las aplicaciones de delivery, que tienen comisiones de hasta 37% con impuestos.

"Es muy difícil, antes era un elemento más de la estructura del negocio, ahora tienen una posición dominante y no deja rentabilidad para sostener los costos", advirtió. 

Además explicó que las aplicaciones no exigen habilitación municipal, por lo que hay mucha comercialización en plataformas que no poseen los mismos costos fijos que un local comercial con estructura. 

Por ahora, bares y restaurantes de la ciudad están habilitados en formato delivery y take away (dentro de la modalidad de compras de cercanía). Desde Aehgar trabajaron en dos protocolos de seguridad e higiene específicos, tanto para gastronomía y hotelería, que abarcan desde la modalidad delivery hasta la reapertura escalonada. 

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